1 de febrero de 2010

Yo. Comencé a escribir por necesidad, de hablar mucho y terminar diciendo nada. Soy el desastre en persona, busco, me desespero, ordeno, tiro, reacomodo, me pregunto, a veces encuentro. Canto en mi cabeza cuando no quiero oír lo que me dicen y no he encontrado la manera de que la música entre por mis oídos sin que salga de mi boca. Tengo 1000 muecas inoportunas para 1000 situaciones oportunas. Me enamoro y desenamoro con la misma rapidez, pero en el inter, quito las manos al amor hasta topar con pared. Prefiero besos, en lugar de versos…realidad tangible. Creo que al soundtrack de mi vida le hace falta un buen estribillo. Vivo la vida en intervalos de 15 minutos, con el volumen muy alto, pero bien ecualizado. Lloro con los finales felices y río con las tragedias. Sueño despierta y canto mientras duermo. No creo en la suerte, pero no dudo en el funcionamiento del Karma.Quiero saberlo todo, pero a veces me distraigo y a veces no me importa mucho. No se gramática y aun así escribo, sin saber si lo hago bien… Y no, no tengo compostura.

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